No es para estar súper contento con una séptima posición, pero al menos hemos visto aspectos positivos del coche. Hemos hecho la vuelta rápida en carrera, y rodando muy rápido cuando tenía pista libre. De hecho, faltando 20 vueltas iba detrás de Kovalainen y al final acabamos séptimo y octavo. Hemos hecho cosas que en otras carreras no hemos podido hacer, como luchar con Brawn, o sacarle dos segundos a otros coches”.
“En la primera mitad de la vuelta de calentamiento me avisaron que había un problema con el embrague y, en la salida, patinó demasiado y volvimos a perder posiciones. A causa de rodar con tanto tráfico al principio fue difícil ganar posiciones”.
“Me quedé antepenúltimo en la primera curva y, a partir de allí, la carrera estaba difícil para poder acabar entre los cinco primeros, o incluso en el podio, un objetivo que hoy hubiese sido posible”.
“Ha quedado claro que tenemos que mejorar en clasificación. Si salimos entre los cinco o seis primeros, tenemos ritmo para poder luchar por esas posiciones. Si salimos más atrás no podemos avanzar. Es fundamental para Hungría hacerlo mejor el sábado”.
“Estoy mucho más optimista en las últimas carreras. Más allá de que no podíamos puntuar, nos costaba mucho mejorar y salir de esa novena o décima posición en la que estábamos. Aquí hemos visto alguna señal de que vamos en la dirección correcta y hay que empezar a ir rápido otra vez".
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